Llamado Para Alabar

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"Cada mañana y cada tarde debían estar presentes para agradecer y alabar al Señor" 1 Crónicas 23:30 NVI

Si pudieras desear para ti el ejemplo perfecto, ¿cuál sería? David era un hombre ocupado. No era fácil aferrarse a una corona en el mundo fraccionado del Medio Oriente, entonces y ahora. El corazón de David estaba realmente puesto en le construcción de una casa para el Señor. Quería crear el hogar más hermoso para Dios que él pudiera imaginar. Aunque Dios no le permitió realizar la construcción, David obtuvo Su permiso para reunir todos los materiales necesarios para que su hijo, Salomón, pudiera cunmplir la tarea.

El hecho de que la tienda del tabernáculo no tenía que ser trasladada a través de todo el país también creó un turno de trabajo para muchos de los Levitas. Aquellos cuya tarea había sido empacar y transportar todos los objetos de adoración y sacrificio estaban ahora sin trabajo. Así que Dios los reasignó. De acuerdo a los versículos 28, 29 de este pasaje, debía ocuparse de todas las "cosas" en el tabernáculo. No era un trabajo fácil ya que Dios tenía regulaciones muy estrictas sobre cómo debían ser manipulados los artículos usados en la adoración y el sacrificio.

Pero los Levitas tenían otro trabajo, uno que podía ser calificado en la categoría de "el mejor trabajo". En la mañana y de nuevo en la tarde, los Levitas debían "estar presentes...para agradecer y alabar al Señor".

Yo amo cantar. Así que, ¿por qué no hago la que hacían los Levitas: apartar tiempo en la mañana y en la tarde para dar gracias y alabarlo? Estoy ocupada con las otras "cosas", así que no me ocupo con las "cosas" que más disfruto. ¿Qué está mal en este cuadro?

Los Levitas tenían que ser equilibrados. Ellos debían ocuparse de las otras "cosas" y también alabar a Dios. Las órdenes de Dios sobre cómo debían ser llevadas a cabo sus tareas eran muy estrictas. Tenemos "cosas" de las que también debemos ocuparnos, pero Dios no debería tener que regular el tiempo de alabanza y acción de gracias en nuestras vidas. Estos deben ser una acción natural de un corazón agradecido; lo primero de nuestra lista de cosas "por hacer", no la parte "recortable".

Recuerda: Sí la eternidad debe ser dedicada a Su alabanza, ¿no deberíamos estar practicando ahora?